jueves, 27 de marzo de 2014

5. Una barbacoa entretenida.

678 Días antes de que te fueras


- ¡Para! - India se retorció sobre su cama mientras apartaba a Louis de un manotazo.

- Soy tu novio, técnicamente debes dejar que haga lo que quiera contigo. - la chica abrió la boca indignada y se sentó con las piernas cruzadas.

- Que seas mi novio no implica que me mates a cosquillas cuando te de la gana.- Louis resopló, aunque de forma divertida.

- Pero qué quejica. - se tumbó en la cama y se quedó mirando al techo. India le observó mientras sonreía. Tenía mucha suerte de tenerle, no solo por el hecho de que era su novio, sino por tenerle en sí, cerca. Al final, acabó abandonando su posición y se tumbó al su lado, pero en vez de mirar al techo, le miraba a él. - ¿Qué pasa? - dijo él girándose hacia ella.

- Que eres demasiado guapo. - sonrió.

- Tú sigues siendo la chica más bonita del mundo. - India se mordió el labio.

- No mientas.

- No lo hago.

- ¿Y Megan Fox? - Louis rió por lo bajo.

- Bueno, lo de Megan Fox es un caso aparte. Pero prefiero mil veces salir contigo a salir con ella. - la chica se sonrojó y se le quedó mirando. - ¿Sabes que los ojos se te ponen un poco bizcos cuando estás muy cerca?

- ¿Y ahora? - India se acercó más.

- Ahora te veo los puntos negros.

- Pues yo te veo los pelos del mostacho y de la barba. - Louis se pasó una mano por la barbilla. Apenas tenía pelos, pues eran muy pequeños, pero ya tocaba afeitarse. - Prométeme que un día te afeitarás delante mío.

- Si tu me prometes que un día te cambiarás de ropa interior delante mío.

- ¡Louis! - India le dio un manotazo y él rió.

- Por probar no pasa nada... - ella acabó sonriendo, y después volvieron a mirarse, en silencio.

- ¿Crees que tu madre ya sabe lo nuestro?

- No creo, pero en breves lo sabrán. - India suspiró.

- ¿Y si no le gusta que estemos juntos?

- Mi madre te adora. Es más, te trata mejor a ti que a mí. Le encantas. Asi que no creo que tengamos problema. - ella se llevó una mano a la frente.

- Supongo que no, que todo irá bien.

- Irá. - la abrazó y ambos se quedaron dormidos, uno al lado del otro, esperando que de verdad todo fuese bien.




- India... Psst... India... - la chica notó cómo alguien le zarandeaba el brazo, y supuso que era Louis. Abrió los ojos sonriendo, dispuesta a darle un pequeño beso, pero a punto estuvo de besar a su hermano Liam.

- ¡Liam! - del susto que se llevó casi se cae de la cama, suerte que se agarró a la camiseta de él.

- Shhh no grites. - le tapó la boca.

- ¿Qué  pasa? - Louis asomó la cabeza y miró a Liam. - Tío, ¿qué coño haces aquí?

- Eso mismo me pregunto yo. - él suspiró.

- A ver, que me explico. - se giró y acabó boca arriba. - Estabais vosotros dos aquí, durmiendo, pero iba a subir mamá a veros y para disimular me he hecho el dormido con vosotros. Pero luego me he quedado dormido de verdad.

- Liam... Cariño... - India le miró. - Mamá nos ha visto a Louis y a mí dormir juntos muchas veces, por ejemplo en verano.

- Y nunca ha dicho nada - habló Louis.

- Ya pero ahora es distinto.

- En realidad no. Nos comportamos como antes. - excusó India.

- Bueno, yo ahora tengo que hacer papel de hermano y evitar tener sobrinos a temprana edad - Louis y la chica rieron.

- Tranquilo. - Liam suspiró.

- Bueno, ya que está todo claro, ahora a dormir, ¿no? - la pareja se miró conteniendo una risa.

- Liam... - dijeron a la vez.

- Vale vale, ya me voy. Es que me aburro. - él se levantó y abandonó la cama.

- Liam, te prometo que Abby y yo te vamos a buscar una buena novia. - le dijo su hermana.

- A poder ser que esté buena. - y con esto se dio la vuelta y se fue. Entonces India se giró y volvió a darle la cara a su novio, quien pasó una mano por su cintura y la acercó. Amos se miraron y comenzaron a reírse.

- ¿Pues sabes qué? Mientras dormía creía que te estaba abrazando, y resulta que era a Liam. - Louis aarugó la nariz.

- Parece que voy a empezar a tener celos de mi propio mejor amigo.

- Os acabaríais odiando. - le siguió la corriente India.

- Nah, él nunca podría odiarme, que lo sé yo.




Presente

[NARRA INDIA]



Me acurruqué en los brazos de Zayn y dejé que mi mente volase a otra parte.
Aún los recuerdos de la fiesta golpeaban mi cabeza sin parar, haciendo que los reviviese una y otra vez.
Admito que ver a Abby pegando a Louis hizo que un sentimiento de satisfacción dominase mi cuerpo, pero en cambio, la mitad o un poco más de mí sintió pena, y se preocupó por si le estaba haciendo daño. Y como soy demasiado buena, porque es la verdad, soy buena; esa parte compasiva ganó a la otra, y por eso, esta mañana llamé a Abby para echarle la charla. Simplemente que no le dije que el motivo era que Louis me había dado pena, sino que lo cubrí diciendo que había montado un numerito y que alguien podría haberse enterado de lo que pasó; que en parte es verdad.

Respecto a Louis, no hablé con él, y tampoco me lo encontré en la calle, cosa que era probable sabiendo lo cerca que vivíamos. Asi que me quedé con la duda de saber cómo estaba, y si tenía marcas o señas en la cara, aunque Abby tampoco es que pegase muy fuerte, pero me pareció ver algo de uñas y arañazos.

Suspiré. ¿Por qué me preocupaba por Louis?
A ver, analicemos la situación.
Llevaba sin verle dos años.
Nuestra despedida, si es que se puede llamar despedida, fue incómoda, y es como si hubiese un tema pendiente entre nosotros.
Y ahora estaba guapo no, lo siguiente. Y con una voz ronca que derretía a cualquiera.

Pero ante todo debo concienciarme de lo que hizo.
Me engañó.
Y joder, que tenía dieciséis años. ¿Qué pretendía? ¿Ser el más malo del parque?
Es que no me cabe en la cabeza eso de que un chico de dieciséis años vaya de madurito y porque le da la gana y le sale de la punta del nabo, decide engañar a su novia.

Manda cojones.

Mejor dejar el tema. Que me estaba enervando por la situación y a la vez me perdía en la imagen de Louis, de cómo está ahora.

Abracé más fuerte a Zayn.


- Estoy deseando que llegue julio.

- Yo también. - él me frotó el brazo y me dio un beso en la coronilla. A mediados de julio, mi grupo y yo habíamos planeado ir a pasar una semana en la costa, para aprovechar el tiempo que nos quedaba juntos. Y eso significa no Louis, no Emer, y no cosas malas para mi cabeza. Lo único malo es que Niall no estaría, porque se iba a no sé qué de voluntariado o así.

- Aún no me creo que mis padres hayan dejado que durmamos en la misma habitación.

- Cielo, si te dejan ir a mi casa a dormir, no es muy raro que te dejen para esto.

- Ya bueno... - miré hacia arriba y le acaricié la barba. Después me fijé en sus brazos. - ¿Cuál va a ser el siguiente tatuaje? - si algo destacaba con creces en Zayn eran los numerosos tatuajes que tuviese. Lo increíble es que viviendo en otro sitio, quizás en una ciudad, le mirarían mal. Pero aquí, en este pueblo, al conocerse todo el mundo, ya te tatuases mil veces o no, ibas a seguir siendo quien eras y eso no cambiaba. Mira, esa era una ventaja de vivir en este perdido pueblo.

- No sé, aún no lo he pensado. Quizás me haga uno antes de ir a la universidad. - tragué saliva. Había sacado ese tema y yo ya me había puesto un poco más seria. No me gustaba pensar en que Zayn y yo nos íbamos a distanciar, que le perdería. Porque la cosa es que ambos sabíamos que las relaciones a distancia no funcionaban, aunque quizás.... Además, nuestras universidades estaban a penas a dos casi tres horas de diferencia. - Ey, sé que te has puesto tensa. - Abrí los ojos como platos. A veces, a pesar de llevar más de un año con Zayn, me sorprendía el hecho de que me conociese también.

- ¿Cómo lo has sabido?

- Has  bajado las cejas, marcado la mandíbula, y porque me estás estrujando. - sonreí vergonzosamente y relajé un poco los brazos.

- Lo siento... - me mordí el labio. Él se echó un poco para atrás y me sujetó la barbilla.

- India, mírame. - lo hice tímidamente. - Aún nos quedan más de dos meses, ya tendremos charlas y mierdas de esas cuando toque, ¿vale? - asentí. - Pues eso. Ven aquí. - sonreí y cambié mi posición, poniéndome sobre su regazo y pasando las manos por detrás de su cuello.

- Te quiero.

- Te quiero. - me junté a él y le besé. Sí, definitivamente le iba a echar mucho de menos, lo sé. Tras unos minutos nos separamos mínimamente, quedando pegados por nuestras frentes.

- Que raro que casi no haya gente.

- Son las cuatro de la tarde y hace muchísimo calor. Nosotros somos los únicos tontos que estamos aquí asándonos. - pues tenía razón. Volví a besarle, y así estuvimos, cada uno en los brazos del otro, hasta que oímos unos ruidos, como de algo rodando por un suelo duro. Zayn y yo nos apartamos y nos miramos con duda. El parque hacía como una especie de colina, y desde donde estábamos, no se veía un parque de skate que había cerca. Ambos nos movimos y fuimos hacia un punto desde el cual pudimos ver quién se había atrevido a exponerse al sol.

- Me cago en la puta... - susurré.


Cómo no, la Monster High estaba ahí, marcando su lado más marimacho mientras se movía con su tabla con ruedas, elevándose cuando llegaba a los extremos.
Cuando veía a alguien montando en skate o algo así solía quedar admirada, pero cuando veo a Emerson, lo único que me apetece es empujarla y que su cara se comiese el asfalto.
Y hablando de comerse el asfalto, cerca de ella estaba, cómo no, el lameculos de Emer, Louis. Parece que no se separaba de ella, ¿eh?
En mi interior colapsé.
¿Por qué me hacía esto?
Me sería mucho más facil llevar esta situación si él no se pegase todo el rato a la chica a la que más odiaba en el mundo.


- ¡Vamos a saludarles! - y ese era mi novio, que podría dejar de ser amable por un día, y podría cerrar la boca.

- No creo que sea buena idea...

- Que sí. Además, ya es hora de que supereis los problemas que tuvisteis en la infancia. - alcé una ceja. ¿Qué? - Por cierto, nunca me habías hablado sobre ellos. - hombre, mejor que pensase que eso era lo que ocurría entre Emer y yo.

- Ya... Es que casi ni me acuerdo... - y entonces él estaba de pie y estaba bajando la pequeña colina. - Mierda.

- ¡Buenas tardes! - gritó cuando se puso en lo alto de la elevación. Maldije otra vez y me acerqué a donde estaba. Desde ahí podía ver la cara de mala leche de Emer. Quizás esa era la primera cosa que teníamos en común, que no nos gustaba la presencia de la otra. Bueno, en realidad no la primera cosa. La primera fue Louis.



[NARRA EMER]


Me cago en la reputísima madre del Zayn este y de la guarra aquella.
¿Es que una no puede estar con el skate tranquila?
Miré a Louis, y este me sonrió.
Claro que me sonrió. Quería que yo fuese todo lo maja posible con Zayn mientras él se cepillaba a India.
Pues mira, que le den por ahí.
Voy a hacer lo que yo quiera.
Vi como Zayn y ella bajaban por la colina pequeña que había. India no estaba feliz, eso se veía, y me causó cierta diversión.
Parece que las dos deseábamos en este momento que la tierra nos tragase.
Zayn saludó a Louis.


- ¿Que hacéis por aquí? - preguntó el castaño.

- Nada, momento de pareja. - miré a Louis, al cual se le había borrado la sonrisa. Él me miró de reojo y esta vez fui yo la que disfruté sonriéndole con maldad. Vi que India se había sentado a unos cuatro metros de Louis, y mientras tanto, Zayn se acercaba a mi.- Hola. - me dijo.

- Adiós. - fui a poner el skate en el suelo para subirme en él.

- ¿De verdad tienes que ser así conmigo? Ayer lo pasamos bien.

- Soy así con todo el mundo, independientemente de si exista algún remoto y extraño momento bueno con ellos o no.

- Con Louis no eres así.

- ¿Tienes envidia de Louis? - una sonrisa salió en mi boca. Si él supiera...

- No, en sí no tengo envidia. A ver, si me llevo contigo pues muy bien, pero si no tampoco me va a importar mucho. Pero prefiero caerle bien a la gente.

- Que pena, a mi no me has caído bien. - él asintió, pero con una sonrisa. Después se me quedó mirando. Mira que era raro el chaval este. Bajé la mirada hacia mis manos. Odiaba los silencios incómodos. Primero, porque eso requería que hubiese otra u otras personas, y eso en sí ya me cabreaba. Segundo, porque no me daba la gana ser yo la primera que abriese la puta boca y sacase tema porque, ¿para qué me voy a molestar en mal gastar el tiempo teniendo que oir lo que me va a acabar diciendo alguien? Y tercero, porque yo era la primera que se ponía nerviosa e incómoda. De nuevo hice el amago de poner el skate en el suelo.

- El lunes sale a la venta el disco de A Day To Remember. - levanté la cabeza y le miré.

- Ya lo sabía. - dije con frialdad - Lo he reservado.

- Entonces tendrás que dejármelo. - básicamente me descojoné en su cara.

- ¿Acaso estamos en los 80? Utiliza youtube. - esperé que se le quitase la gracia, pero solo sonrió más.

- ¡Zayn! Eh... ¡Tenemos que volver a casa! - oímos gritar a India. Ambos nos giramos y la vimos sentada al lado de Louis.

- ¡Ya voy! - respondió Zayn. Después volvió a centrar su atención en mí. - ¿Estarás este viernes?

- ¿Dónde?

- Mi casa, la barbacoa.

- No creo.

- ¿Por?

- Porque no me da la gana ir.

- Será divertido.

- ¿Estar con gente a la que no me importaría ver con la cabeza debajo de la rueda de un coche? - suspiró.

- Bueno, entonces supongo que ya te veré.

- O no. - antes de que le diese tiempo a hacer otra cosa, puse por fin el skate en el suelo y me monté en él, alejándome. Estaba puto loco si creía que iba a ir a la maldita barbacoa.





[NARRA INDIA]


Había visto como Zayn se iba hacia Emer, y un ataque de celos me entró.
No tuvo suficiente con Louis si no que también dejaba que Zayn se aproximase.
Vamos, esto ya de coña.
Suspiré enfadada.
Y si no era suficiente, alguien tuvo que joderme la marrana y sentarse a mi lado.
¿Que quién fue?
Pues el de siempre.


- Gracias por parar a Abby ayer, aunque me lo merecía - empezó diciendo. Yo le ignoré - ¿Por qué lo hiciste?

- No quería que se formase un numerito y todos averiguasen... - me callé y volví a suspirar.

- Parece que se llevan bien. - él hablaba de Emer y Zayn.

- No creo. Emer es insoportable y no aguanta a nadie. - vi que se asomaba una sonrisa en su cara.

- Tienen mismo gustos de música, ¿sabes? - asentí. Como si me importase... - Y Zayn suele vestir de negro. - alcé una ceja. Vestir de negro no tiene nada que ver.

- ¿Qué intentas decirme?

- Nada nada... Solo que... Encajan muy bien, incluso puede que mejor que tú y Zayn. - vale, ya me había irritado.

- ¿Pero de qué vas? Bah, es que siempre la cagas. Que sepas que Zayn en su vida se plantearía salir con la niña rara esa.

- Bueno. - se encogió de hombros y sonrió. Uf, es que me enervaba, enserio. Siempre creyéndose el más listo. ¿Y que clase de indirectas mandaba con eso? Joder, que se vaya a pastar morcillas. Además, para colmo, ahora no dejaba de pensar en que Zayn y Emer hacían buena pareja.

- Sinceramente Zayn es buen chico, y me quiere, asi que no se dejaría llevar por ella. - toma indirecta. Me mordí el labio porque a mí era a la primera a la que le dolía, pero tenía que responderle de alguna forma.

- Tengo la sensación de que nunca me perdonarás.

- Quizás algún día lo haga, pero tendrás que demostrarme que te lo mereces. - le oí suspirar.

- Indi... Digo India, dame una oportunidad, por favor. Para empezar de cero, solo amigos. Pero no quiero perderte. Ya lo hice una vez y fue horroroso. - No me atreví a mirarle, porque sabía perfectamente el efecto que tenían en mí sus ojos.

- ¡Zayn! Eh... ¡Tenemos que volver a casa! - grité, pues quería irme. Me puse de pie y sacudí la suciedad de mi pantalón, esperando que Zayn viniese ya. Sabía que Louis estaba mirándome, esperando una respuesta, pero no le iba a responder. Estar enfadada con él es lo único que hacía que me controlase y no me echase en sus brazos. Si fuésemos amigos de nuevo, quizás no sabría resistirme. El problema era que yo en el fondo no quería rechazar su oferta.





(...)




Coloqué el último sandwich de salsa rosa con lechuga y pavo en la bandeja y la llevé a fuera, a la mesa en la que estaba el resto de comida.
Ya era viernes, y estaba en la casa de Zayn, donde se iba a hacer la barbacoa. El día anterior, jueves, gracias a Dios se pasó rápido. La abuela nos llevó a Abby y a mí de compras, a un centro comercial de fuera del pueblo. Anduvimos tanto y compramos tanto que cuando llegamos a casa, fui directa a mi cama y ahí me tiré de plancha, lista para descansar.
Me vino bien esa salida, así me distraía un poco.

Alisé el vestido negro veraniego que me compré ayer y que llevaba puesto hoy y comprobé que ningún pelo se hubiese salido del moño. Después fui hacia donde estaban Zayn y los demás.
Aún era pronto para que el jardín de los Malik se llenase con invitados, pero mis amigos y yo habíamos decidido venir para ayudar a Trisha, la madre de Zayn.
Poco a poco la gente fue llegando a la casa, y me duele admitir que cuando parecía que venía alguien, miraba atenta a si era Louis.

Maldita imbécil dependiente...



- Zayn, ¿no tienes alguna prima guapa que esté soltera o así? - habló Niall - Bueno, tampoco pasa nada si tiene novio.

- A mis primas ni las toques - contestó Zayn

- No eres buen amigo.

- Oye, ¿esa de ahí no es Keira? - señaló Harry a una chica rubia de la esquina. Keira fue una antigua alumna de nuestro instituto, que se graduó hace dos años.

- Ahora vuelvo. - Niall le dio la cocacola que llevaba en la mano a Abby y salió pitando.

- Esto ya es un problema... - habló Liam.

- Ahí están.- oí que decía Zayn, y todos nos giramos hacia la entrada del jardín.


Sí, ahí estaban, Emer y Louis.


- Que horror de vestido. - dijo por lo bajo Abby, para que no lo oyese Zayn. Miré a Emer, quien no parecía estar muy contenta de estar aqui. Pues mejor, que se fuese entonces. Me fije en lo que llevaba puesto. Era un vestido negro de tirantes que en la parte superior tenía un dibujo de Pesadilla Antes de Navidad, y la parte de abajo era como de gasa negra. Además llevaba unas medias que eran negras hasta mitad del muslo, y ahí se podía ver como la cada de un gato, en cada pierna. Me fijé en sus brazos, en los cuales apenas llevaba pulseras, solo tres de estas de goma que suelen ser de grupos de música, no lo sé. Y finalmente, en los pies, llevaba unas Martens granates, que debo admitir que me dieron mucha envidia. (Ropa)

- A mi me gusta pesadilla antes de navidad- dijo Liam, que se llevó una mirada mala por parte de Abby.

- Y mira, que medias, si parecen, yo que sé, de un chino.

- Son graciosas.- volvió a decir Liam.

- Bueno, ¿ a ti qué te pasa? Recuerda lo que ocurrió con India.

- Si a ella la odio, pero a su ropa no. - Abby bufó.

- El mundo está mal.





[NARRA EMER]


Que asco de todo, que asco de fiesta y que yo qué sé.
Bueno, fiesta no, si no barbacoa, que quizás eso era lo único bueno. ¿Pero salvo eso? Nada.
Mataré a Louis algún día por obligarme a venir a estos sitios.
Y todo porque tengo que molarle a Zayn.
Pero a ver, que yo no quiero nada con él. Y el lerdo de Louis quiere encasquetármelo. Si no le tuviera cariño estaría ya bajo tierra.

Salí con Louis al jardín y anduvimos un poco. Yo aquello me resultaba bastante vomitivo.
Gente que no conocía en una casa que no conocía.
Y encima la gente, aunque no la conocía, me caía mal.

Sí, definitivamente mataría a Louis.

Yo localicé antes que él a toda la panda de imbéciles del grupito de India y tal. Y bueno, ahí estaba la puta de Abigail que me repasaba con mala cara.
¿Pero de qué iba? Me miraba como si fuera un mono de feria.
Menuda guarra.

No le dije a Louis que estaban ahí porque no me daba la gana acercarme.
Asi que seguimos andando hasta llegar a una mesa en la que había todo tipo de comida.


- Odiarás a la gente, pero esto está buenísimo - dijo Louis mientras cogía un trozo de queso Cheddar con fritura de bacon por encima.


Me encogí de hombros. Puede que sñi, que la comida estuviese super buena, pero no iba a mostrar ningún tipo de admiración hacia algo relacionado con gente que me cae mal.
Yo también empecé a comer, pillando una de las minihamburguesas que había en un plato. Eché ketchup y salsa brava y me la comí. Cuando me giré para mirar a Louis, vi que de lejos se acercaban Zayn, India y Harry.
Genial.
Si Roma no va a la montaña, la montaña va a Roma.
Tragué lo que tenía en la boca y sin decirle nada a Louis, salí de ahí.
No tenía porqué hablar con gente que me caía mal.




Llevaba ya un rato dando vueltas, camuflándome de cualquier signo de acercamiento que pudiese haber por parte de quien sea.
Había perdido la pista a Louis, quizás estaría tirándose  India por ahí, o mejor, matándola.
No lo sé.
Pero como me aburría, demasiado, me dediqué a comer de todo tipo de cosas que encontraba por ahí.
Y esto no lo previne, de verdad, pero en cierto momento noté a alguien a mi lado.


- Debe ser muy doloroso tan puta. - Para puta ella. Alcé la mirada y observé con desprecio a Abigail.

- Pero deber ser ser tú. - vi como sonreía brevemente.

- Tú y yo aún no hemos tenido una conversación seria.

- Ni la tendremos porque no me gusta que estés cerca mío. - Vamos, es que era de coña, que me viniese el perrito faldero de la otra y me soltase esas cosas. Demasiado trabajo fue evitarla durante estos dos años, pero fue fácil pues no teníamos ninguna clase en común y ni nos veíamos. Pero claro, ahora llega Louis con sus planes pacíficos y desarma todo. Hice amago de irme, pero noté como unos dedos se cernían dolorosamente sobre mi muñeca derecha, apretando fuerte, muy fuerte. Me giré hacia ella con cara de mala hostia. Ya me había cabreado, pero tenía que contenerme. - ¿Me sueltas o te parto la boca con el suelo?

- Mira - que conste que seguía sin soltarme - el resto del mundo te tendrá miedo, pero a mí solo me das pena, no me asustas ni lo mínimo. No solo pena, sino asco. Lo que hiciste no fu cometer un error como cualquiera haría, sino que te rebajaste al nivel de puta. Que triste que en eso se haya basado toda tu adolescencia. - me zafé de su brazo con brusquedad y sonreí.

- Lo triste es que creas que acaso me importa lo que dices. - me di la vuelta. Ya está, me iba de esta casa. Osea, que vengo a pesar de que no quiero, y encima esta guarra se me pone farruca. Eché a andar sin mirar atrás, y sin preocuparme de qué comida aún no había probado. Pero por precaución, solo precaución, miré por encima del hombro. Me cago en la gran arpía. Me estaba siguiendo. Aligeré el paso y me metí en la casa, pero había un problema. No me acordaba de cómo se llegaba a la entrada, asi que abrí la primera puerta que encontré y me metí en ella, echando el pestillo después.

- ¡Me dijiste que habías puesto el pestillo! -me giré cagándome en diez. ¡Por qué tenía tan mala suerte? Estaba en un baño, bastante grande para lo que suelen ser los baños. Y apoyado al fregadero, con una chica entre sus piernas, estaba ese tal Niall.

- Se me olvidó - contestó él mirándome con cara de pocos amigos.

- Por mí no os cortéis, ¿eh? - dije.

- ¿Quién es ella? - habló la chica.

- Soy la del trío. Siento por el retraso, ahora me quito la ropa. - fingí.

- ¿Pero qué...? - se quejó Niall.

- Eres un cerdo - la desconocida se separó de él, y para mi satisfacción, le dio una bofetada. Después, sin mirarnos, abrió la puerta del baño y salió. Pero esto fue mala idea, porque al otro lado, estaba Abby.

- ¡Zorra! - cerré la puerta lo más rápido que pude y volví a echar el pestillo. Luego me apoyé contra la madera y suspiré. Menuda loca.

- ¿Tú de qué vas? - abrí los ojos y vi al chico rubio cruzado de brazos. No le contesté, solo puse una mueca de asco. - Ah, que no hablas, pues mejor, porque yo tampoco quería hablarte. Si me permites, quizás, me dejas salir.

- Estás hablando.

- Bueno, ¿me vas a dejar salir? - bufé.

- Me da que no. - sonreí con crueldad y vigilé la puerta.

- ¡Abby! - gritó, y entonces noté cómo aporreaban la puerta.

-¡Zorra, sal si tienes cojones!

- Mira, es que resulta que soy mujer, y tengo ovarios. No sé tú.

- ¿Qué pasa aquí? - se oyeron más voces de fondo.

- Me cago en la puta... - susurré. Por estas cosas quería quedarme en casa.



[NARRA INDIA]


No sé cómo lo hacía, de verdad, pero siempre ocurría, siempre.
Me quedaba sola aunque fuese un minuto, y ese minuto se convertía en un infierno porque venía Louis, y ya estaba jodida.


- El miércoles no me contestaste. - no quise mirarle, asi que me centré en el trozo de pan con pescado y mayonesa que tenía en la mano.

- Ya.

- ¿Por?

- Pues porque no Louis, porque no.

- ¿Que hay de malo en que quiera que todo vuelva a ser como antes? Cuando éramos amigos.

- Que nada podrá ser lo de antes. - me cansé.

- Lo estoy intentando India.

- Haberlo intentado cuando estabas tirándote a Emer. - enfada eché a andar. ¿Dónde estaba todo el mundo? Divisé a Harry y fui hacia él.

- India. - me llamó Louis por detrás. Que coñazo de hombre, macho. Seguí andando y llegué a mi destino.

- Harry, ¿has visto a Abby?

- Sí, estaba yendo detrás de Emer creo. - abrí los ojos como platos.

- ¿Qué? - oí a Louis a mi lado.

- Me cago en la la leche. ¿Hacia dónde han ido?

- Se han metido en la casa. ¿Pasa algo? - ni me molesté en contestar. Eché a andar hacia dentro.

- ¿Abby? - no me hizo falta buscar mucho, pues estaba frente a la puerta del baño aporreándola.

- ¿Qué pasa aquí? - preguntó Harry cuando llegamos a su lado.

- Pues eh... - Abby dudó - Que no sale del baño.

- ¡Esta loca me está tocando las pelotas! - se oyó a Emer dentro.

- Sacadme de aquí por favor. - ese era Niall.

- ¿Las pelotas? - giró Abby - ¿No se supone que tú tenías ovarios? 

- Emer, sal. - habló Louis.

- Esa tía está puto loca. Que se vaya y que me deje en paz. - habló desde el baño.

- ¡Te mereces que te mate! - por favor, que alguien controlase a Abigail. Yo me tapaba la cara de vergüenza, sabiendo que el secreto acabaría saliendo a la luz.

- No creo que por tardar mucho en el baño se merezca que la trates así. - todos miramos a Harry con cara extraña. - Por cierto Niall, ¿qué haces con Emer en el baño?

- Copular, ¿tú qué crees? - todos oímos el gran bufido de Emer.

- Harry, no es solo por eso. - habló Abby - ¡Que salgas de una vez! - dio una patada a la puerta.

- Eh, eh, eh, que la puerta no te ha hecho nada - Zayn y Liam se unieron a nosotros.

- Os habíamos visto entrar en la casa - dijo mi hermano.

- ¿Qué pasa aquí? - preguntó Zayn.

- ¡Ella es lo que pasa! - señaló Abby.

- ¿La puerta? - Tanto Zayn como Liam estaban confundidos.

- ¡No! Que Emer está dentro.

- ¿Emer? - la llamó mi novio.

- El que faltaba...

- Venga Ems, sal. - le dijo Louis.

- Cuando se vaya la loca.

- Pues deja que salga Niall.

- No que sino entra la loca.

- ¿Niall y Emer están los dos dentro del baño? - Liam me miró alzando la ceja, ya que ambos sabíamos que Niall sabía lo que hizo Emer, y dudábamos que llegase a encerrarse con ella.

- No ha sido mi culpa. - se excusó el rubio al otro lado de la puerta. 

- A ver, Abby, tienes que dejar en paz a Emer, que los problemas que tuvieran India y ella en la infancia no te abarcaban a ti - intentó poner paz Zayn.

- ¿Problemas de infancia? - Aby estaba muy perdida.

- No entiendo. - habló Harry. Oímos a Louis suspirar.

- Yo ya no aguanto, hay que decírselo. - Tanto Liam como Abby y como yo le miramos con los ojos como platos. Le mataría,d e verdad, le mataría si lo decía. En ese momento Emer abrió la puerta un segundo, simplemente para asomar la cabeza y decir:

- Por mí dilo, que a mi me la suda. - y cerró.

- ¡Chicos, haber aprovechado! - se quejó Niall al otro lado.

- No Louis, no. - hice caso omiso de Niall y me centré en el otro. - No lo hagas, por favor.

- Tengo que hacerlo, merecen saberlo.- las lágrimas empezaron a hacerse presentes en mis ojos. No. No, no no. Si lo decía me derrumbaría. No quería que ni Zayn ni Harry lo supieran. 

- A mi me da igual - se oyó a la guarra de Emer.

- La cosa es que... - Louis comenzó a hablar. - Abby está enfadada con Emer porque Emer... - ya me preparé para lo peor. Sentía las miradas de Abby y Liam sobre mí, y si Niall no estuviese dentro de ese cuarto de baño también me estaría mirando así. - Emer quiere quitarle el novio a India. Zayn, Emer está enamorada de ti. 


No sé si pasaron milésimas de segundo o segundos, pero fue el tiempo necesario apra que la puerta del baño se abriera, asomaran dos cabezas, que todos abriésemos los ojos como platos y que dijésemos al unísono:


- ¿Qué?



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POR FIIIIN!
No os voy a soltar el mismo rollo de siempre porque ya lo habeis odio muchas veces y porque es tarde y tengo que hacer cositas
que sepais que yo soy la primera que se enfada consigo misma por tardar en subir
eso sí, no creais que yo todas las tardes me rasco la tripa y no hago anda, no. Hago cosas hasta las doce-una y a esa hora me pongo a escribir, pero al ser tarde me quedo dormida y así llevo una semana
bueno, eso, que muchas gracias, muchos besos y que lo siento

4 comentarios:

  1. Ayyy lidia no te mato por q yo soy una perra q no se muve ni pa mear jajajajaja me encanta el capitulo

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  2. BLAAAAAAAASK!! OH PADRE! ME ENCANTOOOOO!! SIGUELA! Porfi ;)

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  4. mee has dejadooo con la intrigaa!!es perfectoo siguelo cuando puedas:)

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